sábado, 6 de marzo de 2010

EXAMEN DE PASTELERÍA

Ya nos han dado la lista de las recetas susceptibles de caer en el examen final de Pâtisserie de base, y nos queda un buen trabajo por delante para practicarlas todas. Me temo que nuestros vecinos van a engordar!.
Las recetas son:
  • Tarta clásica de manzana
  • Saint-Honoré
  • Hojaldre: Palmeras y chaussons de manzana
  • Dacquoise
  • Tarta de peras caramelizadas al merengue
  • Moka
  • Brioche parisina y panes de pasas
  • Hojaldre: Pithiviers y sacristanes
  • Bûche de chocolate y pistacho
  • Gâteau basque o bizcocho de mantequilla con crema pastelera
Para empezar, hoy hemos practicado el gâteau basque, o bateau gasque (después de un par de cervezas) y el resultado ha sido extraordinario. Tanto que esta vez los vecinos no van a probarlo. Ha sido el postre de una suculenta comida a base de quesos franceses de aperitivo, con cervecita y vino blanco/tinto (mientras preparábamos todos los platos), boeuf Stroganoff (receta susceptible de examen) con arroz pilaf con verduras, y de postre gâteau basque.

Nunca pensé que estudiar fuese tan divertido!

miércoles, 3 de marzo de 2010

LECCIONES DE COCINA... O DE VIDA?

Cada día asisto a clase durante una media de 9 horas, entre demostraciones y prácticas, e incluso conferencias y talleres con chefs invitados. Aprendemos recetas, técnicas para prepararlas, trucos para evitar o solventar las incidencias que puedan surgir, maridaje entre los distintos ingredientes, entre salsas y platos principales, tiempos de cocción y de conservación,... Escuela de cocina.

Pero la realidad es bien distinta. No hay más que mirar con más atención para entender que aprendemos mucho, pero mucho más que eso.

En las demos todos y cada uno de nuestros profesores comparten su sabiduría con nosotros. Y no son cualquier tipo de chef: el chef personal de Chirac, el chef pàtissier de Sarcozy, el chef de Maxim's, el mejor chef obrador de Paris 2004, un chef con una estrella Michelin,... No se limitan a las recetas contenidas en la lección sino que nos aportan sus "petites histoires" y sus "petites surprises" que aportan una gran diferencia. ... Escuela de generosidad.

En las prácticas entramos de verdad en el funcionamiento de una cocina profesional. Y hay una gran diferencia entre la cocina-afición y la cocina-profesión. Ésta última es sin duda un deporte de alto riesgo: cuchillos hiper afilados, cacerolas calientes, aceite hirviendo... y 10 compañeros teóricamente cada uno a lo suyo, estresados todos porque hay que cumplir el timing previsto y servir al cliente "à l'heure", cada uno de un pais diferente, hablando un idioma distinto.
Así pasó lo que pasó: el primer día contábamos (muertos de risa) los dedos que nos quedaban sanos (sin cortes, magulladuras, quemaduras y otro sin fin de heridas). Pero hemos aprendido a funcionar como un equipo. Es cierto que cada uno está en su receta y en su plato, pero a la vez todos estamos a una.
Hay reglas escritas como "Chaud!!!" (hay que gritarlo) que es la expresión que utilizas cuando llevas algo peligroso, en principio una cacerola caliente, pero también se aplica a cuchillos, un plato servido,... Y es algo similar a "cuerpo a tierra" en el ejército: todos nos quitamos del medio y la prioridad la tiene el que grita "chaud".
Y como "Goûter, goûter, goûter" o probar, probar, probar como medio para corregir las posibles desviaciones del plato en el proceso de elaboración. Viene a ser como "ubicación, ubicación, ubicación" como los 3 elementos de éxito de cualquier comercio.
Pero también hay reglas que hemos desarrollado en nuestro grupo, tácitas, que me consta que otros grupos no han conseguido. Y me refiero al compañerismo, a la ayuda mutua. Un compañero olvida encender el horno al entrar en la cocina (fundamental para cumplir el timing) y se lo enciendes, ves una olla hirviendo más fuerte de la cuenta y la bajas, pruebas la salsa del de al lado para darle tu opinión, pesas ingredientes para el que va retrasado,... Y en esto TODOS en el grupo A (nuestro grupo) actuamos de la misma manera. ... Escuela de compañerismo.

Y por supuesto, como en todo hay una jerarquía. El último responsable de todo, absolutamente todo lo que ocurre en la cocina es el chef. Y tiene que saber que estamos a sus órdenes. Y tiene que poder confiar en nosotros (si pide Paprika, no le des Cayena). Y las órdenes no se cuestionan, NUNCA. Así, lo más oído en la cocina es "Oui, chef" con convicción, como en la marina americana. Si el resultado del plato y la jornada de trabajo es bueno, nuestros chefs nos han enseñado que el éxito lo aportamos entre todos y lo comparten con nosotros; pero, si las cosas no salen según lo esperado, son ellos los que asumen las consecuencias, en nombre de su equipo, defendiendo a su equipo. Como ejemplo, el otro día en una demo la asistente equivocó paprika con cayene, así que el chef preparó solomillo Strogonoff con cayena (casi le da un pasmo cuando probó la salsa). Pero asumió la responsabilidad del error, y nos enseñó cómo evitar ese tipo de problemas mayores, sin solución cuando el plato tiene que ser servido. ... Escuela de confianza.

Este fin de semana he estado mala en casa, con un trancazo tremendo. Y no he parado de recibir llamadas y mail de mis compis, de mis nuevos amigos ofreciéndome su ayuda para traerme comida, mantas, medicinas, compañía... Y te das cuenta de que las relaciones que se establecen cuando estás solo fuera de casa (como estamos todos aquí) son mucho más sólidas y sinceras. Si se te olvidan las llaves de casa dentro, sabes que cuentas con todos ellos para compartir cama; si faltas un día a clase, sabes que organizaremos una reunión de trabajo-cocina para enseñarte los secretos del plato (no te vaya a caer en el examen); si te sientes "blue" (esta vez en inglés porque es el idioma que utilizamos entre nosotros), todos estamos dispuestos a salir de mojitos para animarte. .... Escuela de amistad.

Y en esta nueva vida que estoy aprendiendo a vivir el Cordon Bleu es la mejor escuela. ... Escuela de vida.

Gracias umi, gracias bui por enseñarme que tengo que aprender a jugar mis cartas, que el resultado no está en las cartas que la vida te ha dado, sino en cómo las juegas.

domingo, 28 de febrero de 2010

¡A ESTUDIAR PARA EL EXAMEN!

Eh voilà! El próximo miércoles tenemos el examen teórico, y el día 17 de marzo tenemos el temido examen práctico de "cuisine de base", el final de mi primer tercio de aventura. Así que, de nuevo sintiéndome adolescente, de vuelta a los libros.

En el examen teórico tenemos una parte tipo test en la que nos hacen preguntas acerca de técnicas y tiempos de cocción, combinación de alimentos, composición de diferentes salsas,...; una parte de asociación en la que tenemos que asignar los diferentes ingredientes de distintas recetas; una parte de definiciones en la que tienes que explicar en qué consisten diferentes técnicas culinarias; y una lista de ingredientes en la que tienes que rellenar los huecos (cantidades o ingredientes de una receta). Y todo en francés o en inglés. ¡Completito!

Y luego el examen práctico. El viernes nos dieron la lista de las 10 recetas susceptibles de caer en el examen. De esas 10, los chefs eligen 2 y, en el momento de entrar en la cocina sacas una bola de una bolsa, totalmente al azar y te toca una de ellas. Tenemos 2h30 para terminar y presentar la receta y nos evalúan en base a la limpieza, organización y técnica en la preparación, y en base a la presentación y degustación del plato. Lo primero lo hace el chef que supervisa el examen, que es uno de los que hemos tenido a lo largo del curso, que, además del plato nos pedirá la preparación de "fondos de alcachofas torneados". Y lo segundo lo hacen chefs ajenos a la escuela, invitados especialmente para la ocasión. El plato lo presentamos con un número, de forma que es anónimo y así se evitan problemas de predilecciones o posibles manías de nuestros chefs habituales.

Y he aquí la lista de "susceptibles":
  • Pularda escalfada con salsa Suprème y arroz "au gras"
  • Pollo asado en su jugo
  • Filetes de rodaballo Dugléré
  • Estofado de ternera a la antigua con arroz pilaf
  • Chuletas de ternera con guarnición "Grand-Mère"
  • Pato asado con nabos
  • Boeuf Strogonoff con arroz de verduras
  • Pollo salteado al estragón con verduras al estilo italiano
  • Terrina de pescado caliente con salsa de mantequilla blanca
  • Filetes de dorada fritos con hinojo
Y ahora viene lo mejor, porque ¿cómo se estudia un examen de cocina?, pues... cocinando. Así que nos reunimos para ir al mercado, comprar lo que necesitamos y nos vamos cada día a una casa diferente a guisar. Y por supuesto a comer y a acompañar el plato con un buen vino. ¡Nunca me lo he pasado tan bien estudiando!

Ya os contaré cuáles son las recetas susceptibles para el examen de "pâtisserie de base", pero ¿os imagináis el peligro que tiene estudiarlas?.


martes, 2 de febrero de 2010

Y YA LLEVO UN MES!

Ya ha pasado un mes, y por un lado parece que fue ayer cuando llegué, y por otro que es esto lo que llevo haciendo toda la vida.

En la escuela todo está perfectamente organizado. Cada lección se divide en tres horas de demostración, en las que el chef guisa y los estudiantes miramos, tomamos notas, preguntamos y degustamos, y tres horas de práctica en la somos nosotros los que intentamos hacer la receta y es el chef el que nos mira, nos corrige y prueba nuestros guisos.
Hay compañeros sólo en cocina y otros que sólo hacen pastelería. Pero nosotros, los 10 "over achievers" (así es como nos llaman según Garima) vamos a por todo. Total, que estamos todo el día en la escuela.
En total en la escuela somos 86 estudiantes de 24 nacionalidades diferentes. Como dice mi padre "globalización".

Por ahora lo que hemos aprendido son las técnicas de cocina y pastelería básicas, aplicándolas a diferentes recetas. Por ejemplo, técnicas de corte de verduras, cómo se trocea o deshuesa un pollo, cómo se prepara un pescado en filetes partiendo del pez entero, cómo se trocea un conejo, cómo se prepara hojaldre, pasta brisa dulce y salada, pasta choux,... Y somos capaces de hacer palmeras en 2 horas, preparando nosotros el hojaldre, por supuesto!

Y entre clase y clase PARIS. Qué gran ciudad! Me encanta andar sin rumbo (con mi guía de paris por arrondisements en el bolso por si me pierdo) y encontrar y descubrir todas esas pequeñas-grandes esquinas, casas, placitas, iglesias,...

Total, que vuelvo a ser adolescente, en el cole, con tarjeta prepago de teléfono, saliendo de copas con los compañeros...